Los superhéroes no han podido con las muñecas de Maribel y las camas y mesitas de Jorge
Juguetes tradicionales que siguen comprando los barranquilleros.
Maribel López y Jorge Eliécer Anillo reciben con orgullo a los padres de familia que llegan a la Feria del Juguete ubicada en el Cementerio Universal, en Barranquilla.
Es 24 de diciembre, el día más importante del año para los niños y los dos son fabricantes de juguetes que se han convertido en una tradición y que siguen siendo comprados.
Estos juguetes y su creadores, sobrevivieron a la pandemia. Sí, el virus del Covid-19 no se los llevó por delante y volvieron a instalarse en el puesto de la Feria del Juguete.
Jorge Eliécer lleva 30 años y Maribel, 25, haciendo y vendiendo juguetes, pese a que otros objetos de diversión presentan otro tipo de atracción para los menores.
Son dos pilares. Dos caras tradicionales que encuentran los padres de familia.
25 años diseñando "compañeras"
Maribel empezó cuando era muy niña, advierte, a fabricar las muñecas de trapo, con sus vestidos de colores.
"De ahí salió la creatividad hasta la fecha de ahora", indicó a Zona Cero.
Expresó que lo único que varía en sus diseños es la ropa y los colores porque la muñeca sigue siendo la tradicional, a la que no "puede traicionar".
"La gente siempre viene a buscar esa muñeca", añadió.
La mujer indicó que los clientes siempre vienen a buscar su muñeca, pese a la competencia que hay, porque son "antialérgicas y son accesibles para manejar por las niñas".
Maribel, quien cumple 22 años en la Feria del Juguete del Universal, agradece a su clientela por mantenerla en pie en cuanto a las ventas. Maneja precios accesibles, dependiendo del tamaño de la muñeca.
Resistentes a los superhéroes
Jorge Eliécer, por su parte, es un "veterano de las mil guerras". Como sus mesitas, sillas y camas de madera, que se mantienen firmes.
El hombre recorre el andén para supervisar las pequeñas mesitas y sillas de madera, fabricadas con particular perfeccionismo.
Ubicadas de tal modo, que llaman la atención de inmediato de los clientes, que enseguida asemejan estos objetos con los juegos de mesa o las camas que tienen en casa. Sirven mucho para las muñecas y muñecos.
"Este juguete tiene su gente. Aunque haya mucho superhéroe, siempre vendo", expresó a Zona Cero el hombre que gana $30 mil pesos por cada cama o juego de mesa con sillas.